La morena se masturba dulcemente después de una carrera matutina

La chica deportiva de cabello oscuro corrió temprano en la mañana, y cuando regresó cansada, lo primero que no fue a la ducha, sino a la habitación, donde se desnudó lentamente y cayó sobre su cama ancha. Acariciando suavemente el cofre elástico y sintiendo sus papilas rosadas con fuerza ante sus ojos, la morena se quitó las bragas y comenzó a masturbarse con su segunda mano. Se cubrió lánguidamente los ojos, se ganó enérgicamente sus dedos, tocando un clítoris sólido y sintiendo una sensación dulce que requiere que la descarga se acumula dentro de él.